Rio de Janeiro

Con los brazos extendidos, la mirada ligeramente hacia abajo, cubierto de millones de tejas de esteatita y colocado sobre un pedestal, el Cristo Redentor vigila Río de Janeiro desde su posición privilegiada en el Corcovado. Con la Bahía de Guanabara, Brasil, a lo lejos, la estatua vigila las legendarias playas de Ipanema y Copacabana. Apasionada, dinámica y colorida, Río es una ciudad que rebosa de entusiasmo por la vida. Esta energía se palpa en las numerosas celebraciones y eventos que han tenido lugar en la ciudad, incluyendo los Juegos Olímpicos de Verano, dos Copas Mundiales, el Carnaval y más. Río de Janeiro es cuna de la expresiva danza de la samba, que encarna a la perfección los ritmos vibrantes de la ciudad.

Ya sea el sonido de un disco del pionero de la bossa nova, João Gilberto, o las reverberaciones de un multitudinario concierto de Madonna en la playa de Copacabana, Río no es para quienes buscan paz y tranquilidad. Más allá de su producción musical, la ciudad también ejerce una gran influencia en el mundo del diseño, inspirando a figuras como Oscar Niemeyer y Roberto Burle Marx. También está el Copacabana Palace, un auténtico icono del paisaje carioca y el hotel predilecto de la alta sociedad durante el siglo pasado. Esto y mucho más se desprende de las páginas de Río de Janeiro de Assouline, con la perspectiva local de Bruno Astuto.